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'CANELO' ÁLVAREZ

Canelo cambió la bata por el sarape, el cual le diseñan desde Saltillo

En 2015, Canelo subió al cuadrilátero, ante James Kirkland, con su primera vestimenta tradicional de este tipo

DEPORTES

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ESFUERZO. Héctor Tamayo dedica horas al trabajo que le encarga el campeón mexicano. Foto: Archivo/ MexsportCréditos: Mexsport

Hace más de cinco años que Saúl Álvarez dejó atrás las batas deportivas y, en su lugar, cruza el callejón hacia el ring cubierto con un tradicional sarape, diseñado por Héctor Tamayo.

En 2015, Canelo subió al cuadrilátero, ante James Kirkland, con su primera vestimenta tradicional de este tipo.

A partir de ahí, el maestro Tamayo se ha encargado de engalanar la envergadura del campeón; para esta velada será un gabán blanco con grecas en rosa mexicano, de dos metros de largo por uno de ancho, que implicó el uso de 800 hilos, hilvanados con pasión y paciencia en el telar.

“Cuando me comentaron: ‘Queremos que le hagas un sarape a Canelo’, pensé: ‘Es una broma’. No podía creer que el mejor boxeador quisiera portar una obra de arte mía, y ahora me da mucha alegría que tengan la confianza de llamarme de nuevo; me enorgullece que Saltillo se vea a nivel mundial, que se muestre lo que es el sarape. Va con algunas modificaciones; es un gabán especial para él”, comentó el tejedor que esta semana durmió sólo cuatro horas diarias para sacar adelante la pieza del tapatío.

Para Tamayo es muy especial que sus obras conquisten el ring más visto del planeta. 

“Me gusta mucho el boxeo; cuando tengo oportunidad lo practico. Hice ocho peleas amateur; es algo que traemos en la sangre. Mi hermano menor iba a ser profesional, mi primo es (el excampeón) Fernando Rodríguez y tuvimos otro primo bueno: Luis Rodríguez”, recordó.

Hace más de 20 años pidió empleo en El Águila de Oro y trabajó con cobijas; luego aprendió a pintar lana y la familia Mendoza Oyarzábal le dio empleo en El Sarape de Saltillo, que cumple 102 años de tradición.

Cuando Canelo va camino a su pelea, la sensación del tejedor es indescriptible. "Hasta se me enchina la piel de ver cuando va con el sarape”, expresó el maestro de la paciencia, la multiplicación y la creatividad que viste al monarca mexicano.

Por Katia López
BGM