Mazamitla, Jalisco

Este Pueblo Mágico jarocho cuyo nombre significa “lugar donde se cazan los vendos con flechas”, es perfecto si se busca sentirse rodeado de la naturaleza, ya que se encuentra en el corazón de la Sierra Tigre. En éste hay un Parque Ecológico en el que se pueden realizar diversas actividades, sin embargo, su mayor atractivo es poder relajarse en una cabaña, disfrutar del paisaje, comer su famoso guisado llamado “bote” e, incluso, ver las actividades de los locatarios, quienes se dedican principalmente a la ganadería.

Entre los lugares más populares para hospedarse son las Cabañas del Bosque, Monteverde y Rincón del Bosque, en todos se encontrará un gran respiro y una calidez sin precedentes.

Valle de Bravo, Estado de México

Uno de los destinos céntricos favoritos de muchos es Valle de Bravo por la variedad de actividades que ofrece y también la facilidad de relajarse sin ningún problema. Aquí se puede sentir que viaja a un pueblo encantado, ir a un parque de aventuras para lanzarse en parapente o paracaídas, visitar un relajante temazcal o estar en una sierra donde el sonido de las cascadas hace uno vibrar.

Un hospedaje muy cercano a la cascada Velo de Novia y a las diferentes áreas para practicar senderismo, ciclismo y hasta esquí es Casa Acento, en la cual se puede encapsular junto a los amigos y pasar una tarde en la piscina o su terraza, mientras se disfruta de la vista.

Barrancas del Cobre, Chihuahua

Recordar las raíces siempre es importante y no hay mejor lugar que la Sierra Tarahumara, cuyo punto clave son las llamadas Barrancas del Cobre y le roban el aliento a cualquiera que se atreve a mirar al vacío de estas formaciones rocosas. Para los que tienen alma de explorador, este sitio es increíble para practicar senderismo -aunque se debe ir bien abrigado debido a las bajas temperaturas de la zona- por La Sinforosa o el Parque Nacional.

También se puede acampar sin problemas y arrullarse con el sonido de la naturaleza o con el pasar de El Chepe, el tren que recorre la sierra. Y para hacer de la estadía mucho más cómoda, alojarse en Cabaña Los Portales es una gran idea, ya que cuenta con zona al aire libre para admirar las estrellas y preparar la comida con leña.

Mazunte, Oaxaca

Este Pueblo Mágico al sur de Oaxaca tiene mucho que ofrecer a sus visitantes, desde la fascinante arquitectura de sus calles, hasta las creaciones artísticas de sus habitantes. Pero sin duda lo que atrae a más personas son sus costas que inspiran a cualquiera y lo llaman a relajarse; una gran opción para hospedarse son los bungalows de Villa Luna de Miel que se encuentran a orillas del mar y muy cerca de Punta Cometa.

Además, algo que es imperdible para los amantes de los animales es visitar sus santuarios de tortugas desde los cuales se puede ver a esta especie en su hábitat natural. Y para los más intrépidos están las actividades de rafting, kayak y cañonismo en la Sierra Madre Sur.

Zacatlán de las Manzanas, Puebla

Las cascadas Tulimán y el árbol Papalotl -conocido como el “árbol hueco”-, son los referentes de Zacatlán en Puebla, un destino que impresiona con su naturaleza. Otro de sus puntos característicos es el Valle de las Piedras Encimadas, conocido así por sus piedras volcánicas que están formadas una sobre otra y se puede pasar mucho rato mirándolas para descubrir diferentes formas.

La Barranca de los Jilgueros dicen que es el mejor punto para tener una vista completa de la zona, además ésta es bordeada por un mosaico monumental de 100 metros que fue creado por la artista Trish Metzner-Lynch. En el centro, una actividad obligada es comprar unas manzanas, no por nada es la fruta que bautiza este lugar y, por supuesto, no se puede desaprovechar el quedarse en un chalet de La Tierra Grande para seguir en sintonía con la vegetación.