ARTE Y CONTEXTO

El arte de meternos bajo el tapete II

Del total de las 330 obras de la colección del Museo Universitario de Arte (MUAC), 272 son de hombres y 58 de mujeres

OPINIÓN

·
Julén Ladrón de Guevara/ Colaboradora/ Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

Es difícil acostumbrarse a dar explicaciones del por qué es importante que exista una conmemoración como el ‘Día internacional de la eliminación de la violencia contra la mujer’. También me cuesta comprender que para tantos, resulte difícil asimilar que exista un tipo de violencia específica en contra de una persona, sólo por ser mujer. Al respecto, me parece que o no terminamos de comprender de qué va el tema, o el instinto de conservación de la violencia misma, distrae la atención del punto principal, desestimando la necesidad que tenemos de ser auxiliadas de formas específicas.

También creo que el tipo de educación al que nos han sometido por décadas, es determinante de esta situación y los ejemplos sobran. Dentro de esta configuración perversa en la que se asienta nuestra sociedad, también se asientan los acuerdos silentes para otorgar o no, cierto reconocimiento a las mujeres del mundo de las artes, que es uno a los que pertenezco. Como ejemplo, tenemos a la Academia de Artes, cuyo propósitos fundamentales son el apoyo y difusión de las artes, la salvaguarda del patrimonio artístico de la Nación, la organización de eventos culturales de carácter público y privado, la asesoría en asuntos de orden cultural, el encargo y adquisición de obras, tanto de sus miembros como de otros artistas mexicanos de reconocido prestigio.

Las cifras de miembros para 2018, que son las últimas visibles, son las siguientes:  Arquitectura: 11 hombres, 0 mujeres. Escultura:10 h, 2 m. Historia y Crítica de Arte: 12 h, 4 m. Gráfica: 10 h 3 m. Música: 14 h, 1 m. Pintura: 17 h 0 m. Artes Escénicas: 7 h, 1 m. En el caso de El Premio Nacional de Ciencias y Artes, desde su creación en 1945 hasta 2018, ha otorgado 88 premios en la categoría de Bellas Artes a 75 hombres y 13 mujeres.

El Museo Universitario de Arte Contemporáneo (MUAC), por ejemplo, en la página oficial enuncia su colección así: "El MUAC tiene como objetivo construir una historia de las prácticas artísticas en México a partir de los años cincuenta. Está compuesta por dos acervos: el artístico y el documental que buscan establecer un estrecho diálogo que permita estudiar los procesos del arte de las últimas seis décadas en México. Se distingue por ser la única colección pública de arte contemporáneo en el país, que de manera razonada pone especial relevancia en el mapeo de obras representativas del arte producido a partir de 1952 al día de hoy” y sus números son: 330 obras en total, de las que 272 son de hombres y 58 de mujeres. Conociendo el inconmensurable talento de las mujeres artistas, no entiendo el desbalance.

Esto quiere decir que hay cientos de piezas clave que no conocemos gracias a esto, que nuestros rompecabezas históricos están incompletos porque las piezas que faltan están en una bodega. Esto quiere decir que nuestra identidad patrimonial se forja a través de la narrativa de curadoras y curadores que omitieron nombres relevantes. Nos están ocultando información relevante para asentar nuestras ideas desde un mejor lugar como país. Para comprendernos a cabalidad, nos hacen falta los relatos de las mujeres que han ocultado, acallado o subestimado en su dolor, y sobre todo, urge comprender que si le decimos al mundo que algo nos dueles, es porque nos están provocando un gran dolor, cuya energía nunca desaparece, simplemente se transforma. 

POR JULÉN LADRÓN DE GUEVARA
CICLORAMA@HERALDODEMEXICO.COM.MX
@JULENLDG